Sin un minuto de descanso, hemos concluido las fiestas navideñas.
Nuestra Hermandad le ponía el punto y final a la Navidad con la participación, un año más, en la cabalgata de Reyes.
Hasta llegar a la calle la noche previa a los Reyes, un grupo de personas han trabajado duramente para darle forma y color, luz y materia a esta carroza que representaba el claustro de un convento.
Con una vidriera de fondo en la que se representaba la Sagrada Familia, un nutrido grupo de monjitas cosian, davanaban, tejían y rezaban, acompañadas de un frailecito.
Hemos podido escuchar felicitaciones y palabras de agrado hacía nuestra carroza, lo cual siempre es de agradecer y anima a continuar trabajando por la Hermandad.
Vaya desde aqui nuestro agradeciemiento a cuantas personas han trabajado por hacerla realidad (diseño, carpinteria, pintura, iluminación, vesturario,...) Como no, a todas las niñas que en ella salieron. Ellas le han dado vida a esta carroza.