Fueron entorno a cuarenta personas las que se dieron cita en el patio central de la Casa, para con la cruz de fondo celebrar un día de hermandad, que además sirvió para programar la realización de la "Muñeca de San Isidro"
Tras la bendición de D. Pedro, pudimos disfrutar de esta riquísima paella, que resulto del gusto de niños y mayores. Y para postre, tarta y café.
El colofón a este día de convivencia lo pusieron nuestros pequeños, que siempre andan inventado, y prepararon una cruz pequeñita, que luego colocaron en un tablero que les sirvió a modo de mesa de paso y que a hombros pasearon por los alrededores de la Casa de Hermandad.