A esa hora nuestra Hermana Mayor Mercedes Muñoz encabezaba una pequeña comitiva que entraba por la puerta vieja del Santo Hospital para saludar protocolariamente a la Cofradía de Sayones. En ese momento llovizneaba y en la lejanía se oía la llegada de la Centuria con la banda de cornetas y tambores al frente.
Pero a la hora de salida dejó de llover por lo que Jesús Nazareno salió a la calle y se cantó la Sentencia. Cuando Jesús Nazareno se marchó por la calle Jesús eran alrededor de las 07 de la mañana y poco a poco iban llegando hermanas con sus abrigos -hacía frío- y escapularios sobre sus hombros.
En el interor de Santa Catalina estaba todo listo pero ante la inestabilidad meteorológica la Junta de Gobierno presente se reunió en cabildo de aguas. El tiempo apremiaba y finalmente se decidió salir a la calle para el rezo del Vía Matris.
Poco antes de las 8 de la mañana cruzamos el dintel con temor a la lluvia. Comenzaba la oración conducida por N.H Mari Carmén Herruzo. El pequeño cortejo estaba formado por bandera y varas a sus lados, en presidencia Junta de Gobierno, cuerpo de acólitos ceroferarios y turiferarios, capataz, paso de nuestra Titular, hermanas y devotos. Debemos decir que este año nos vimos muy sorprendidas por la cantidad de hermanas que acompañaron el rezo, más que otros años, a pesar de la tristeza del Martes Santo y el frió de la Madrugada. A todas Gracias.
Con el tiempo justo, muy justo, llegamos a la Cruz de la Unidad donde nos encontramos con la Cofradía de Sayones y rezamos conjuntamente la estación correspondiente. A partir de ese momento ambas Hermandades irian juntas por el mismo itinerario hasta Santa Catalina. Se iba deprisa.
En la Avenida Villanueva de Córdoba y debido a una ráfaga de viente fuerte el escapulario bordado que la Virgen lleva en sus manos voló sin saber donde calló, encontrandose grácias a Dios poco después, a unos metros del paso.
La Hermandad consiguió librarse de la lluvia y llegó a su templo cerrándose las puertas rezando la última estación en su interior y cantando la salve.